Es cierto, en los últimos años llevamos un estilo de vida cada vez más inactivo o sedentario. Una situación que puede deberse en gran medida a que muchos trabajos de hoy implican horas sentado ante el ordenador o de pie, limitando así el movimiento corporal. Además, mucho del ocio de ahora también se basa en permanecer quieto delante de pantallas. Y sin embargo, nuestro cuerpo está diseñado para vivir en constante movimiento.
Seguro que alguna vez has oído que actividad física y salud son dos conceptos que van de la mano. De hecho, los beneficios de tener una vida activa son muchos y muy significativos. Pero si estás pensando en empezar a practicar ejercicio y, en caso de tener algún problema de salud o si tienes alguna duda, no olvides consultar con tu médico o farmacéutico para que te recomiende la mejor actividad física para ti: pasear, correr, nadar, ir en bici, hacer yoga, pilates o taichí, jugar al tenis, al frontón o al pádel, bailar o ir al gimnasio; solo por mencionar algunas.
Tabla de contenidos
Descubre los principales beneficios de estar activo:
- Combate el sobrepeso y la obesidad. Vivimos una epidemia de obesidad, y estar activo te ayudará a compensar la ingesta de calorías superfluas.
- Cuida tu corazón. Mejorarás tu salud cardiovascular, tendrás menos posibilidades de sufrir enfermedades del corazón y bajarás tus niveles de triglicéridos y tu tensión arterial.
- Previene la diabetes. Llevar una vida activa reduce los niveles de glucosa en sangre. Y si eres diabético, te ayudará a controlarla.
- Ayuda a eliminar los hábitos tóxicos, como fumar.
- Alivia el estrés y previene la ansiedad. Estar activo hace que tu cuerpo libere endorfinas, unas hormonas que harán que te encuentres mejor, más feliz y relajado.
- El cerebro envejece mejor. La actividad corporal hará que tus circuitos cerebrales sigan funcionando de manera óptima.
- Mejora las relaciones sociales. Haciendo ejercicio con otras personas enriquecerás tu vida social.
- Previene las lesiones musculares y la osteoporosis. Además, también reduce el riesgo de sufrir caídas.
- Mejora la calidad del sueño. Estar activo permite conciliar el sueño con más facilidad.
- Mejora la salud sexual. Los hombres reducirán el riesgo de sufrir disfunción eréctil y las mujeres verán aumentado su apetito sexual.
¿Qué puedes hacer para empezar?
- Comienza a caminar. Aunque sean 15 minutos al día, tres días a la semana. Ve aumentando el tiempo y la frecuencia hasta llegar a una hora diaria. Si hace tiempo que no caminas, comienza por sitios llanos y en horas en las que no haga ni mucho frío ni mucho calor.
- Un truco sencillo para mantenerse activo es aparcar un poco más lejos de lo habitual o bajarse un par de paradas antes en el transporte público para caminar un poco más.
- Si optas por la bicicleta estática, empieza con cinco minutos por la mañana y cinco por la tarde todos los días e intenta ir aumentando cinco minutos cada semana.
- Si tienes un problema de columna, no son recomendables deportes como el squash, el pádel o el frontón, ya que pueden potenciar las lesiones de espalda.
- En las personas de edad más avanzada, es ideal retomar el deporte que se ha practicado anteriormente, como montar en bicicleta o la natación. Si no se ha practicado ningún deporte, caminar es lo más aconsejable. Otras opciones son ir a bailar, hacer Pilates o hacer excursiones e ir a museos. Si vamos a participar en competiciones o carreras populares, es imprescindible acudir al médico de cabecera o a un especialista del deporte para hacernos un reconocimiento.
En todos los casos, es fundamental acompañar la práctica deportiva de una dieta adecuada, tal como: comer cinco veces al día, incorporar raciones de fruta y verdura 2-3 veces al día, restringir los hidratos de carbono de absorción rápida y comer la cantidad adecuada de grasas y proteínas.
Como ves, mantener un estilo de vida activo son todo ventajas para tu salud. Así que no permitas que nada te detenga, no hay ninguna razón para privar a tu organismo del movimiento que necesita para estar mejor. En seguida notarás cómo tu cuerpo y tu ánimo te lo agradecen, ¡no olvides que los beneficios son innumerables! ¿A qué esperas para ponerte en marcha? Si aún te quedan dudas, no olvides consultar con tu médico o farmacéutico o con un experto en deporte para que te asesore.
Fuentes:
- Cinfasalud.com
- Información y estudios internos de Farmalastic
*Esta información en ningún momento sustituye la consulta o diagnóstico de un profesional médico o farmacéutico.
