Condromalacia rotuliana
Qué es la condromalacia rotuliana
La rótula o patela es un hueso situado en la cara anterior de la rodilla, que se articula con el fémur. Permite aumentar la potencia muscular del cuádriceps. El cartílago rotuliano evita el roce de un hueso con otro, y se encuentra en la cara profunda de la rótula.
La condromalacia rotuliana se define como el desgaste del cartílago posterior de la rótula y/o la región inferior de los cóndilos femorales.
Cursa con dolor difuso en el área de la rótula al flexo-extender la rodilla: subir o bajar escaleras, levantarse de la silla, ponerse en cuclillas. Puede generar rigidez y es frecuente la sensación de inestabilidad y crepitación (arenilla o crujidos) en casos más avanzados. En ocasiones hay derrame e incluso atrofia del cuádriceps.
Algunos datos sobre la prevalencia de esta patología
Un 63% de las artroscopias de rodilla realizadas en pacientes de todas las edades muestran lesiones de cartílago.
Personas que practican deportes sobre terrenos duros: corredor de maratón o ciclistas.
Factores predisponentes para sufrir esta patología
Traumatismos: directos en rodilla anterior, fractura de rótula, mal alineamiento post-traumático, etc.
Género: las mujeres son dos veces más propensas que los hombres han de desarrollar condromalacia rotuliana.
Posturas/actividades en semiflexión de la rodilla (coger objetos).
Actividades que requieran subir/bajar repetidamente: subir y bajar del autobús, bajar escaleras, etc.
Práctica de deportes que impliquen flexo extensión repetida de rodilla (correr, saltar), especialmente sobre terrenos duros, lo cual supone incrementar la presión sobre la articulación.
Personas sedentarias que sobrecargan la articulación, y personas con insuficiencia en los músculos extensores de la rodilla.
Sufrir rótula alta, displasia troclear o alteraciones del ángulo Q de la articulación.